Érase una vez
https://revistaelobservador.com/opinion/46-camino-a-laponia/14465-erase-una-vez
LA ciudadanía necesita políticos no cuentistas. El domingo en la plaza de Colón de Madrid ante los convocados por PP, Ciudadanos y Vox leyeron un manifiesto con afirmaciones claramente falsas sobre el Gobierno de España. ¿Qué importa mentirle a la ciudadanía? Ante las críticas por ese proceder sin los más mínimos escrúpulos, el PP tuvo que salir a defenderse: “el manifiesto que se leyó ayer contenía una gran parte de veracidad”. Hace años que el Partido Popular le perdió el respeto a los españoles y a sus propios votantes acosado por la corrupción generalizada que les afecta. Tanto la descomposición del propio partido como las decenas de casos que se acumulan en los juzgados de toda España y que les afectan de norte a sur.
Y esa manera de actuar a la desesperada no solo afecta a los dirigentes nacionales del PP, otros políticos que nos cogen más cercanos también gustan de contar a la ciudadanía cuentos, gustan del cuento chino, del embuste como medio para llegar al poder. Parece que a sociedad debe soportar que en campaña electoral el discurso político se llene de falsedad sin atender a la diferencia para la ciudadanía en que te prestan el voto o robarles el voto sabiendo que estás mintiendo.
ÉRASE una vez un candidato del PP a la Presidencia de Andalucía que prometió crear 600.000 empleos en la campaña electoral, pero apenas 2 semanas después de tomar posesión del cargo ya se olvidó de lo dicho y ante la primera mala cifra de destrucción de empleo en Andalucía ya evitaba la responsabilidad y acusaban al Gobierno de España. Ya no era la Junta de Andalucía la culpable de los parados, ya eran los socialistas en Madrid.
ÉRASE una vez un candidato del PP a la Presidencia de Andalucía que prometió una bajada masiva de impuestos, pero apenas 2 semanas después de tomar posesión del cargo ya dijo que le era imposible cumplir lo prometido. Eso sí, su primera medida en el Gobierno de Andalucía ha sido librar del impuesto de Sucesiones a aquellos que heredan más de 1 millón de euros. Ya han dejado claro para quienes van a gobernar PP, Ciudadanos y Vox.
ÉRASE una vez un candidato del PP a la Presidencia de Andalucía que prometió no pagar el alquiler en Sevilla a los altos cargos de su Gobierno, pero apenas 2 semanas después de tomar posesión del cargo ya dijo que le era imposible cumplir lo prometido. Y cuando una periodista les ponía el espejo delante de sus críticas durante años a los socialistas de ese despilfarro en una de las primeras ruedas de prensa, al Consejero de la Presidencia no le salía la voz del cuerpo para comerse el sapo de sus palabras durante tantos años.
ÉRASE una vez un candidato del PP a la Presidencia de Andalucía que prometió llevar el metro soterrado hasta el Hospital Civil en la campaña electoral, pero apenas 2 semanas después de tomar posesión del cargo ya ha dicho que no va a cumplir lo prometido. Y entonces surgen las críticas de las empresas que explotan el metro por enterarse por la prensa, de los empresarios andaluces que advierten de la necesidad de tener un gobierno en Andalucía serio que cumpla con lo que firma, de la seguridad jurídica. Y los periodistas encargados de poner sobre la mesa el futuro incierto sobre la viabilidad del metro de Málaga, sobre las pérdidas de viajeros y los sobrecostes que puede suponer o sobre las oportunidades que pierde la ciudad para avanzar en sostenibilidad y calidad de vida en toda la zona norte de Málaga.
ÉRASE una vez un candidato del PP a la Presidencia de Andalucía que prometió apostar por la sanidad pública, pero apenas 2 semanas después de tomar posesión del cargo ya han dejado claro que no van a cumplir lo prometido. El Partido Popular ha puesto al frente de Salud a un Consejero y a un gerente que no creen en la sanidad pública, amigos de los despidos, privatizaciones y de las grandes farmacéuticas. Un Presidente de la Junta de Andalucía que ha dicho con la boca chica que hay que “reorganizar” la sanidad y la educación pública ya que se llevaban más del 50% del Presupuesto andaluz. Han puesto al zorro a guardar las gallinas y ya mismo dejarán los servicios públicos desplumados.
ÉRASE una vez un candidato del PP a la alcaldía de Málaga que se define de centro cada vez que coge un micrófono pero que ha gobernado claramente escorado a la derecha durante 20 años de alcalde.
ÉRASE una vez un candidato del PP a la alcaldía de Málaga que ahora reclama al Gobierno de España del PSOE las inversiones que no se atrevió a pedir durante los 7 años de Presidencia de Mariano Rajoy.
ÉRASE una vez un candidato del PP a la alcaldía de Málaga que no cumplía lo que firmaba ni con otras administraciones públicas ni con sus propios socios de gobierno de Ciudadanos que durante 4 años les dieron un cheque en blanco para continuar al frente del Ayuntamiento de la ciudad.
ÉRASE una vez un candidato del PP a la alcaldía de Málaga que se vanagloria de pagar anualmente una millonada por museos franquicias mientras se nos cae a pedazos la Alcalzaba y Gibralfaro, los monumentos más visitados de nuestra ciudad, siglos de nuestra historia cayéndose al suelo.
Y es que sería imposible plasmar en un artículo los mil cuentos que Francisco de la Torre contó a los malagueños y que nunca cumplió. En las próximas elecciones municipales de mayo tenemos la oportunidad de acabar con esa manera de hacer política.
LA ciudadanía necesita políticos no cuentistas. El domingo en la plaza de Colón de Madrid ante los convocados por PP, Ciudadanos y Vox leyeron un manifiesto con afirmaciones claramente falsas sobre el Gobierno de España. ¿Qué importa mentirle a la ciudadanía? Ante las críticas por ese proceder sin los más mínimos escrúpulos, el PP tuvo que salir a defenderse: “el manifiesto que se leyó ayer contenía una gran parte de veracidad”. Hace años que el Partido Popular le perdió el respeto a los españoles y a sus propios votantes acosado por la corrupción generalizada que les afecta. Tanto la descomposición del propio partido como las decenas de casos que se acumulan en los juzgados de toda España y que les afectan de norte a sur.
Y esa manera de actuar a la desesperada no solo afecta a los dirigentes nacionales del PP, otros políticos que nos cogen más cercanos también gustan de contar a la ciudadanía cuentos, gustan del cuento chino, del embuste como medio para llegar al poder. Parece que a sociedad debe soportar que en campaña electoral el discurso político se llene de falsedad sin atender a la diferencia para la ciudadanía en que te prestan el voto o robarles el voto sabiendo que estás mintiendo.
ÉRASE una vez un candidato del PP a la Presidencia de Andalucía que prometió crear 600.000 empleos en la campaña electoral, pero apenas 2 semanas después de tomar posesión del cargo ya se olvidó de lo dicho y ante la primera mala cifra de destrucción de empleo en Andalucía ya evitaba la responsabilidad y acusaban al Gobierno de España. Ya no era la Junta de Andalucía la culpable de los parados, ya eran los socialistas en Madrid.
ÉRASE una vez un candidato del PP a la Presidencia de Andalucía que prometió una bajada masiva de impuestos, pero apenas 2 semanas después de tomar posesión del cargo ya dijo que le era imposible cumplir lo prometido. Eso sí, su primera medida en el Gobierno de Andalucía ha sido librar del impuesto de Sucesiones a aquellos que heredan más de 1 millón de euros. Ya han dejado claro para quienes van a gobernar PP, Ciudadanos y Vox.
ÉRASE una vez un candidato del PP a la Presidencia de Andalucía que prometió no pagar el alquiler en Sevilla a los altos cargos de su Gobierno, pero apenas 2 semanas después de tomar posesión del cargo ya dijo que le era imposible cumplir lo prometido. Y cuando una periodista les ponía el espejo delante de sus críticas durante años a los socialistas de ese despilfarro en una de las primeras ruedas de prensa, al Consejero de la Presidencia no le salía la voz del cuerpo para comerse el sapo de sus palabras durante tantos años.
ÉRASE una vez un candidato del PP a la Presidencia de Andalucía que prometió llevar el metro soterrado hasta el Hospital Civil en la campaña electoral, pero apenas 2 semanas después de tomar posesión del cargo ya ha dicho que no va a cumplir lo prometido. Y entonces surgen las críticas de las empresas que explotan el metro por enterarse por la prensa, de los empresarios andaluces que advierten de la necesidad de tener un gobierno en Andalucía serio que cumpla con lo que firma, de la seguridad jurídica. Y los periodistas encargados de poner sobre la mesa el futuro incierto sobre la viabilidad del metro de Málaga, sobre las pérdidas de viajeros y los sobrecostes que puede suponer o sobre las oportunidades que pierde la ciudad para avanzar en sostenibilidad y calidad de vida en toda la zona norte de Málaga.
ÉRASE una vez un candidato del PP a la Presidencia de Andalucía que prometió apostar por la sanidad pública, pero apenas 2 semanas después de tomar posesión del cargo ya han dejado claro que no van a cumplir lo prometido. El Partido Popular ha puesto al frente de Salud a un Consejero y a un gerente que no creen en la sanidad pública, amigos de los despidos, privatizaciones y de las grandes farmacéuticas. Un Presidente de la Junta de Andalucía que ha dicho con la boca chica que hay que “reorganizar” la sanidad y la educación pública ya que se llevaban más del 50% del Presupuesto andaluz. Han puesto al zorro a guardar las gallinas y ya mismo dejarán los servicios públicos desplumados.
ÉRASE una vez un candidato del PP a la alcaldía de Málaga que se define de centro cada vez que coge un micrófono pero que ha gobernado claramente escorado a la derecha durante 20 años de alcalde.
ÉRASE una vez un candidato del PP a la alcaldía de Málaga que ahora reclama al Gobierno de España del PSOE las inversiones que no se atrevió a pedir durante los 7 años de Presidencia de Mariano Rajoy.
ÉRASE una vez un candidato del PP a la alcaldía de Málaga que no cumplía lo que firmaba ni con otras administraciones públicas ni con sus propios socios de gobierno de Ciudadanos que durante 4 años les dieron un cheque en blanco para continuar al frente del Ayuntamiento de la ciudad.
ÉRASE una vez un candidato del PP a la alcaldía de Málaga que se vanagloria de pagar anualmente una millonada por museos franquicias mientras se nos cae a pedazos la Alcalzaba y Gibralfaro, los monumentos más visitados de nuestra ciudad, siglos de nuestra historia cayéndose al suelo.
Y es que sería imposible plasmar en un artículo los mil cuentos que Francisco de la Torre contó a los malagueños y que nunca cumplió. En las próximas elecciones municipales de mayo tenemos la oportunidad de acabar con esa manera de hacer política.
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