Las prioridades. Relato de la incapacidad de un gobernante

A las siete menos cinco minutos de la mañana del viernes, una vez examinada la prensa, tengo que establecer las prioridades para actualizar el blog.

Son muchas las noticias sobre la que me gustaría escribir unas líneas. que me motivan a contar con mi portatil la indignación de la realidad cotidiana. Me planteo escribir alguna buena nueva pero el día no dá para más.

Hoy cierra el diario La Opinión de Granada y todos somos un poco menos libres. Del viento que nos azota sin descanso y que lleva a algunos a perder los nervios. El tiroteo del comandante psiquiatra en Texas que deja 12 muertos o del Alacrana y la piratería.

Pero prefiero tratar sobre las prioridades del gobierno de mi ciudad. Sobre como prioriza sus actuaciones el Ayuntamiento de Málaga, relatando la ampliación de un centro de servicios sociales de la zona centro de mi ciudad. La mala gestión urbanística y social que pasa de ser un juicio ciudadano a una realidad tangible.

En el año 2001 se aprobó un proyecto para la ampliación del centro de servicios sociales de calle Cañaveral en el Perchel Norte - Trinidad. 4 años estuvo en el absoluto olvido este proyecto, dormido en un cajón en los despachos de urbanismo y alcaldía.

No fue hasta febrero de 2006 cuando se adjudican las obras que, obviamente, se habían encarecido hasta en un 20 % debido a la actualización del proyecto y sobre todo actualización de los precios. 630.000 euros para las obras que en 7 meses deberían quedar realizadas e inauguradas.

En noviembre de 2009 la Gerencia de Urbanismo en su consejo de administración vuelve a presentar un proyecto modificado por un 19´95 % de encarecimiento del proyecto hasta los 775.000 euros.

En estos 8 años desde su aprobación y prácticamente sólo sobre el papel el proyecto que debía durar 8 meses ha pasado a durar 8 años, por ahora. Del presupuesto inicial en 8 años se ha encarecido en un 40 % sin que prácticamente se hayan puesto los ladrillos.

Las prioridades del gobierno de la ciudad de Málaga del PP y de su Alcalde nunca han sido ni las políticas sociales ni el urbanismo al servicio de los ciudadanos. En estos campos no se encuentran rentabilidades económicas pese a que el despilfarro del dinero de los impuestos de los malagueños es notable.

No deja de ser un nuevo ejemplo de la irresponsabilidad, de la ineficacia de los gobernantes de la ciudad de Málaga, más interesados en un titular en un medio de comunicación que en satisfacer las demandas de los ciudadanos.

Casi 100 asesores con sueldos millonarios en el Ayuntamiento de Málaga que no han sabido o no han querido resolver que un centro que debió hacerse en el año 2002 haya pasado a ser un agujero negro por el que se han colado 800.000 euros de los ciudadanos malagueños. Un PP cuya imagen de buen gobierno queda en entredicho en cada una de sus actuaciones.

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