Fuente: 30/03/09. Opinión. La tribuna política en EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com
De oportunidades perdidas
Y sin entrar en consideraciones sobre los quehaceres que nos ocupan en la ciudad, hace años que en Málaga deberíamos haber atendido desde el Ayuntamiento tan sabia expresión latina. Y muy especialmente al respecto de las políticas no aplicadas o inexistentes en pro de los sectores productivos, generadores de empleo y riqueza para la ciudad y sus habitantes.
EL PP de Málaga hace años que abandonó a las empresas malagueñas y los polígonos en los que se asientan, a sus empresarios y trabajadores, a su tráfico, a su limpieza y a su falta de seguridad. Francisco de la Torre dio la espalda al tejido productivo centrándose en la construcción.
EN la alcaldía desde el año 2000 no deja de ser curioso que hasta hace apenas unos meses no ha acudido a una visita oficial al Parque Tecnológico de Andalucía. Nueve años con una agenda innegablemente ocupada que le ha impedido acudir a reunirse con los empresarios del PTA. Quizás porque en el PTA tiene la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento socialista de Pedro Aparicio uno de sus mayores logros de futuro para Málaga y Andalucía. O quizás ante la vergüenza política de reconocer que no ha puesto a disposición ni un solo metro cuadrado de suelo municipal para la construcción de parques empresariales, polígonos o naves de promoción pública en la ciudad de Málaga para que se pudiesen desarrollar nuevos proyectos empresariales.
NUEVE años en los que decenas de empresarios han ido asentando su actividad en otros municipios que sí apostaban por el tejido empresarial e industrial en sus ciudades y pueblos. Un éxodo de oportunidades que el PP dejó escapar o simplemente expulsó de la ciudad tras pasar despacho tras despacho del Ayuntamiento de Málaga.
EN estos años municipios como Antequera, Mollina, Fuente Piedra o Humilladero han ido creando una base empresarial potente con millones de metros al servicio de la generación de empleo y riqueza en sus municipios. Lo mismo que ha sucedido en Casabermeja, Colmenar, Álora, Pizarra, Coín, Mijas o Estepona, no importa el color político sino la oportunidad aprovechada para crear tejido productivo para sus municipios, para garantizar empleo a sus ciudadanos.
EL propio análisis realizado con motivo de la revisión adaptación del PGOU de la ciudad de 2004 ponía de relieve como en las 27 zonas industriales de la ciudad no quedaban espacios para que se asentaran nuevas empresas hasta con un grado de ocupación de suelo que superaba el 98%.
EN más de 72 millones de euros valoró el anterior concejal de Urbanismo las necesidades en infraestructuras básicas como redes de agua, saneamiento o alumbrado público. En la actualidad se filtra que las mismas ya superan los 80 millones de euros.
Y en un gesto de opacidad y falta transparencia a la que nos tiene acostumbrado el alcalde del PP, y sin que haya mediado una advertencia de acudir a los tribunales por ahora para obtenerla, se nos oculta tal informe y valoración a la labor municipal constructiva del PSOE. Pero la realidad de los polígonos es tozuda y necia y tiende a visualizarse ante cualquier visita a los mismos.
INFRAESTRUCTURAS que son necesarias para convertir los antiguos polígonos industriales en modernos parques empresariales de futuro, dotados de servicios y equipamientos para trabajadores y empresarios. Pero en esos años el PP no pidió fondos ni ayudas que ofrecían otras Administraciones Públicas, ni tampoco destinó ni un solo euro de los presupuestos municipales a regenerar, a dinamizar las zonas productivas malagueñas.
TAL es así que desde hace 14 años el PP prometió dar una solución definitiva a la carretera del polígono Guadalhorce pero no ha sido hasta la llegada de los 100 millones de euros del plan Zapatero para los ayuntamientos cuando se ha preocupado de su arreglo.
MUY atrás quedan aquellos titulares de “Ha llegado la hora de los polígonos”. Las horas se convirtieron en días y los días en años sin que el PP se dignase a mirar a los que generan empleo en Málaga.
EL alcalde del PP optó hace muchos años por entregar la ciudad a la actividad del ladrillo que proporcionaba una rápida rentabilidad económica tanto para el Ayuntamiento como para algunos muy beneficiados por estas operaciones urbanísticas. Algunos proyectos necesitaron de hacerles trajes a medida, dedicarles horas de labor, de encajes por parte de personas de confianza del alcalde, aunque pagados con dineros de los malagueños.
LAS advertencias de que el modelo económico que se estaba imponiendo en la ciudad necesitaba ir acompañado de una apuesta por diversificar los sectores económicos no han sido atendidas. Predicadores en el desierto de la mayoría absoluta del PP, sinrazón ante las propuestas de la oposición municipal. Del capricho y la inconsciencia del gobernante que creyó que el dinero se fabricaba con cemento y hormigonera. Del que sometió al olvido y relegó a un papel testimonial la interlocución con los agentes económicos y sociales de la ciudad en los años de bonanza económica.
SÓLO copió dos ideas en estos nueve años de mandato tras presentarlas en plenos del Ayuntamiento. Propuestas consensuadas previamente entre el PSOE con las propias asociaciones de polígonos, por un lado el crear guarderías en las zonas industriales y otra para crear una Concejalía de Polígonos que desde el inicio de la actual Legislatura ha dedicado más a sueldos y gastos corrientes que lo que se ha invertido en la realidad.
ANTE las críticas de asociaciones y empresarios la respuesta del alcalde ha sido ningunearlos e ignorarlos. La misma respuesta que obtuvieron los informes elaborados por el propio Ayuntamiento de Málaga sobre la dejadez y abandono que sufren las zonas productivas de Málaga la política ha sido ocultarlos en el cajón del olvido.
HEMOS tenido que esperar a que lleguen fondos de otras administraciones para paliar la crisis como el plan PROTEJA de la Junta de Andalucía y el FEIL del Gobierno Zapatero para que se proyecten incubadoras de empresas municipales y hasta para arreglar aceras y pavimentos en los polígonos.
UN lavado de cara muy publicitado sobre grandes mejoras para los titulares del periódico. Eso sí, sin crear oficinas de atención unificada para las gestiones administrativas para solicitar ayudas para la creación de empresas, sin atender las necesidades de acortar los trámites burocráticos para pedir una licencia de apertura, sin contemplar mejoras en los accesos ni en los tráficos internos, ni en infraestructuras de telecomunicaciones, ni en mejoras ambientales, ni en recogida selectiva de residuos, ni de ahorro energético, ni aumento de la presencia policial.
EN unos días comienza nuestra Semana Santa. Ya se huele a incienso, ensayan las bandas, el bullicio de personas y el resplandor de nuestras cofradías en nuestras calles. Una corte, como si de Felipe II se tratara, acompañará al alcalde a tocar la campana. Los hombres de trono alzarán nuestras imágenes sagradas al cielo e irán en procesión ante el fervor y asombro conmovido de los malagueños.
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