Este es un ejemplo de lo que pasaba ayer lunes en un colegio de Barcelona al dar la clase de Educación para la Ciudadanía, publicado por el Diario El País.
Son 26. 14 chicos y 12 chicas. El profesor, Antón Carrera, saca el tema: la identidad y la tendencia sexual. La clase es interactiva e invita a subir al estrado a un chico y a una chica.
"Hay algunas diferencias entre ellos", dice el profesor.
"Él debe pesar la mitad que ella. No pasa nada. Son dos personas. Los dos son de piel blanca, pero podría ser que no. Y no pasa nada.
Tienen los mismos derechos y las mismas obligaciones.
Han venido a clase a la misma hora, les pondré el mismo examen y el sábado y el domingo harán fiesta. Tienen derecho a venir aquí a ser instruidos y a médico si se ponen enfermos.
¿No os parece que el PP y la Iglesia católica se han pasado nuevamente criticando y atacando al Gobierno por una asignatura como ésta?.
¿Acaso no se debe hablar en los colegios de toda España de igualdad, de libertad, de tolerancia, de solidaridad o de los derechos y deberes?.
¿Acaso enseñar a los niños y niñas a convivir a respetarse a ellos mismos y a los demás hace algún daño al Estado o más bien apoyan los valores de la Constitución española de 1978?.
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